Shopping Trends and the Effect on Cash Management - Brink's Panama
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Tendencias de compras y el efecto en la gestión de efectivo
Empleado de Brink’s
20 abr 2020
Tendencias de compras y el efecto en la gestión de efectivo
Actualmente, la demanda de efectivo sigue siendo resiliente. A mucha gente esto le parece sorprendente, especialmente ante la mayor competencia de métodos alternativos de pago, como las tarjetas de crédito, las tarjetas de débito y las aplicaciones de pago electrónico, como Venmo y PayPal. Sin embargo, el Diario de elección del método de pago de consumidores de 2019, realizado por la Reserva Federal, resalta la manera en que una gran variedad de personas de diversas edades y niveles de ingreso por hogar todavía utilizan dinero en efectivo, e incluso lo prefieren.
Este informe llega a la conclusión de que el efectivo representa el 26 % del total de transacciones, así como el 49 % de los pagos de menos de USD 10. Además, los consumidores típicamente prefieren el efectivo para los pagos realizados en forma presencial, y el 35 % de los participantes usan efectivo para estas transacciones. Este informe también descubrió que los consumidores que prefieren otros métodos de pago aún prefieren contar con dinero en efectivo a la mano como método de pago de respaldo en caso de que su método preferido no esté disponible. Mientras que los métodos de pago electrónicos podrían parecer modernos y convenientes para la mayoría de las compras, existen muchas instancias donde el dinero en efectivo continúa siendo el método de pago más confiable para las transacciones presenciales de escaso valor.
EL EFECTIVO SIGUE SIENDO CONVENIENTE
Este alto nivel de uso de efectivo, junto con el constante crecimiento del comercio electrónico y por medios móviles, está cambiando la manera en que los clientes hacen sus compras, así como sus hábitos de compra. A pesar del aumento de las transacciones sin papeles y en línea, el efectivo sigue dominando las compras minoristas presenciales.
El estudio citado anteriormente también determinó dos motivos principales por los cuales el efectivo es el medio de pago predominante para las transacciones presenciales.
Motivo n.° 1
Las oportunidades de usar dinero en efectivo, con frecuencia, se limitan principalmente a las transacciones presenciales. Por ello, es más probable que los consumidores usen efectivo para transacciones realizadas en tiendas físicas, máquinas expendedoras, parquímetros y taxis que en compras en línea o en pagos de facturas.
Motivo n.° 2
Dado que la mayoría de los pagos que realizan los consumidores corresponden a transacciones de poco valor, el dinero en efectivo es el método de pago preferido para compras de escaso valor. La encuesta citada realizada por la Reserva Federal estableció que la transacción en efectivo promedio era de, aproximadamente, USD 22, y que el dinero en efectivo se utiliza más frecuentemente para los pagos menores de USD 25. El monto del pago parece influir en la elección de un cliente entre efectivo, tarjeta de débito, tarjeta de crédito u otra forma de pago.
Sin embargo, estas tendencias no son nuevas para las tiendas minoristas y los comerciantes, y este uso frecuente de dinero en efectivo presenta la carga costosa y engorrosa de manejar los fondos manualmente.
EFECTOS DEL USO DE EFECTIVO EN LA GESTIÓN DE EFECTIVO
La fuerte demanda y el gran uso de dinero en efectivo están obligando a las tiendas minoristas, los bancos y los transportes blindados a explorar nuevos métodos para automatizar sus operaciones.
Debido a que la gestión de efectivo es un proceso manual y que requiere mucho personal, las tiendas minoristas frecuentemente se ven obligadas a invertir tiempo en el recuento del dinero en efectivo, el balance de los cajeros y el depósito de fondos en el banco. Estas tareas no solo quitan a los empleados de las operaciones diarias y de la atención de los clientes, sino que también exponen al peligro a los empleados y a la tienda.
La gestión manual de efectivo puede aumentar el riesgo de mermas, robos internos y errores humanos. Afortunadamente, la industria de gestión de efectivo ha introducido la tecnología de cajas fuertes inteligentes y soluciones digitales para eliminar muchos de estos desafíos.
SOLUCIÓN DE CAJA FUERTE INTELIGENTE
Ahora que las empresas buscan la forma de optimizar el proceso de transacciones, el desarrollo de las cajas fuertes inteligentes resulta más que oportuno. Al automatizar el proceso de gestión de efectivo, esta tecnología beneficia a las empresas ya que les ahorra tiempo y dinero, además de brindar a los clientes una mejor calidad de servicio.
El diseño compacto de la mayoría de las cajas fuertes inteligentes permite su ubicación óptima en el punto de venta, permitiendo que los empleados inserten el efectivo inmediatamente en la caja fuerte para que pueda validar o rechazar billetes falsos. Depositar el dinero inmediatamente después de la transacción también reduce la exposición en la empresa. Al limitar la cantidad de personas que cuentan y manejan el dinero en efectivo, una caja fuerte inteligente puede reducir significativamente el riesgo de robo interno y mermas.
Además, estas cajas fuertes permiten que las tiendas minoristas consoliden varios días de depósitos para reducir la cantidad de idas al banco. Mientras los fondos están asegurados en la caja fuerte, los datos del depósito se comunican en forma inalámbrica al banco, ofreciendo acceso al informe en tiempo real y facilitando el acceso al crédito diario.
Las tiendas minoristas que usan cajas fuertes inteligentes eliminan la necesidad de que los empleados realicen idas peligrosas al banco para realizar depósitos o solicitudes de cambio. Al optimizar sus operaciones, también reducen los costos de personal y el tiempo dedicado a la entrega manual de efectivo se reasigna a gestionar el negocio o atender a los clientes. Implementar una caja fuerte inteligente no solo aumenta la seguridad de los empleados y las ganancias, sino que también proporciona mayor visibilidad de los saldos de dinero en efectivo .
La necesidad y el uso de efectivo no van a desaparecer en el futuro próximo. La Reserva Federal informó que había, aproximadamente, USD 1.79 billones en circulación a diciembre de 2019. Mientras que el dinero en efectivo continúe jugando un rol principal en el gasto de los consumidores, las tiendas minoristas afortunadamente tienen opciones para mejorar el proceso de gestión de efectivo mientras aumentan la seguridad de sus empleados, sus tiendas y su rentabilidad.
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